sobre la estatua
adictas como son mis hermanas a presuntos implicados era normal que también se hiciesen con los discos en solitario de sus integrantes. sin embargo, tras conocer en persona a juan luis (el guitarrista) les quedaron pocas ganas de mantener contacto con su trayectoria discográfica (no me digas quien eres: quiero endiosarte, dice elias canetti -y también: qué ordinaria se vuelve una persona cuando la vemos con frecuencia, como si se obstinara en vengarse de la idea demasiado elevada que de ella tenemos). nada similar ha sucedido aún con la vocalista soledad giménez (aunque no es descartable: me recuerda demasiado a la odiosa y ridícula ana belén), así que su trabajo en solitario Ojalá (nombre tomado de un tema de Madredeus, el disco es un selección de canciones ajenas) ha sido recibido con alegría y sosiego.
lo he escuchado por encima y me ha parecido bastante triste. la voz de sole es la de siempre, perfecta e inagotable, pero los arreglos dejan mucho que desear (una canción de eric clapton sólo ha de tocarla él o alguno de su calaña -un hendrix o un vaughan). además de eso creo que hay canciones inversionables, porque sólo conociendo el estilo de su autor y escuchándola con su voz cobran sentido. un ejemplo claro es el single La estatua del jardín botánico, que me ha traído a la memoria al gran santiago auserón y radio futura:
Un día más me quedaré sentado aquí
en la penumbra de un jardín tan extraño.
Cae la tarde y me olvidé otra vez
de tomar una determinación.
Esperando un eclipse me quedaré.
Persiguiendo un enigma al compás de las horas.
Dibujando una elipse me quedaré
entre el sol y mi corazón.
Junto al estanque me atrapó la ilusión
escuchando el lenguaje de las plantas.
Y he aprendido a esperar sin razón.
Soy metálico en el Jardín Botánico.
Con mi pensamiento sigo el movimiento
de los peces en el agua
lo he escuchado por encima y me ha parecido bastante triste. la voz de sole es la de siempre, perfecta e inagotable, pero los arreglos dejan mucho que desear (una canción de eric clapton sólo ha de tocarla él o alguno de su calaña -un hendrix o un vaughan). además de eso creo que hay canciones inversionables, porque sólo conociendo el estilo de su autor y escuchándola con su voz cobran sentido. un ejemplo claro es el single La estatua del jardín botánico, que me ha traído a la memoria al gran santiago auserón y radio futura:
Un día más me quedaré sentado aquí
en la penumbra de un jardín tan extraño.
Cae la tarde y me olvidé otra vez
de tomar una determinación.
Esperando un eclipse me quedaré.
Persiguiendo un enigma al compás de las horas.
Dibujando una elipse me quedaré
entre el sol y mi corazón.
Junto al estanque me atrapó la ilusión
escuchando el lenguaje de las plantas.
Y he aprendido a esperar sin razón.
Soy metálico en el Jardín Botánico.
Con mi pensamiento sigo el movimiento
de los peces en el agua
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