dylan's day
la historia comienza con amaral tocando 5 temas a solas con su guitarra y en perpetua lucha con su falda, que enseñaba más de lo deseable (por ella). un par de temas clásicos, algún alarde vocal que otro y un recuerdo a lagartija nick para abrir boca. supo a poco.
tras la espera se apagan las luces en el escenario: emladies and gentelmen etc ect ect... bob dylan!. la banda la forman dos guitarristas, un bajo, el batería y dylan al piano. comienza la función.
bien, ellos te lapidarán cuando intentes ser tan bueno,
te lapidarán tal como dijeron que harían,
te lapidarán cuando intentes irte a casa,
te lapidarán cuando allí estés completamente solo,
pero yo no me sentiría tan solo,
todo el mundo debe ser lapidado
de Rainy day women #12 & 35
antes de eso, chendo había identificado entre el público a quique gonzalez, aquel que canta ayer por la mañana bajé por gasolina/después quemé mi casa por no quemar mi vida. entre balbuceos de timidez logró garabatear nuestras entradas.
el sol había bajado por completo pero el calor crecía. el propio-viejo-bob tuvo oportunidad de saborear el aire caliente cordobés.
a mi lado, inmerso en la solitaria muchedumbre,
está un hombre que jura que no es culpable
de I shall be released
antes de I shall be released, canción nunca editada en disco y sólo escuchada en conciertos, bob había interpretado genialmente Tweedle dee & tweedle dum, de su último disco:
Tweedle Dum te acuchillará allá donde estés
"Ya estoy harto de tu compañía,"
Dijo Tweedle Dum a Tweedle Dee
dylan seguía obsesionado con el no-sonido de su piano y los escorzos de su cascada voz. sólo cuando cogía la armónica recordaba al dylan de sus discos clásicos, porque ni rememorando canciones antiguas nos podía trasladar a la época del Highway 61 o Blonde on blonde. aunque eso cambió un poco cuando comenzó con Stuck inside of mobile with the memphis blues again:
el abuelo murió la semana pasada
y ahora está enterrado en las rocas
pero todos hablan todavía
de la gran impresión que se llevaron.
pero yo me esperaba que pasase,
sabía que perdería el control
cuando encendió una hoguera en la calle principal
y la acribilló a balazos.
Oh, mamá, puede ser esto el fin
antes, la interpretación magistral de Lay, lady, lay había terminado con una micro-tanda de canciones poco conocidas por mí. dylan seguía a lo suyo: tocandose el sombrero, entrando y saliendo de la oscuridad a cada final de canción (qué haría allí?), sin una mirada a público, sin una palabra. lo bueno estaba por llegar.
el fin de fiesta comienza con Forever young, absolutamente emocionante; sigue muy rockeramente con Summer days y a la caseta. en los bises bob se hizo de rogar, pero volvió con tres temas y no dos (como acostumbra).
Eh, señor panderetero, toca una canción para mí,
no tengo sueño y no hay sitio a donde pueda ir
el Mr. Tambourine man sonó irreconociblé, sólo supe qué cantaba en el estribillo (y eso que es de mis preferidas). la enlazó sin pausa con Like a rolling stone, y entonces se dirigió al centro; dijo thanks you y un intento más que baldío de español (muchas gracias); presentó a los miembros de la banda como si estuviera a punto de irse a dormir y terminó el espectaculo con una versión a lo hendrix de All along the watchtower.
después una camisetilla conmemorativa, una cerveza tardía y se acabó. fin del día dylan.
tras la espera se apagan las luces en el escenario: emladies and gentelmen etc ect ect... bob dylan!. la banda la forman dos guitarristas, un bajo, el batería y dylan al piano. comienza la función.
bien, ellos te lapidarán cuando intentes ser tan bueno,
te lapidarán tal como dijeron que harían,
te lapidarán cuando intentes irte a casa,
te lapidarán cuando allí estés completamente solo,
pero yo no me sentiría tan solo,
todo el mundo debe ser lapidado
de Rainy day women #12 & 35
antes de eso, chendo había identificado entre el público a quique gonzalez, aquel que canta ayer por la mañana bajé por gasolina/después quemé mi casa por no quemar mi vida. entre balbuceos de timidez logró garabatear nuestras entradas.
el sol había bajado por completo pero el calor crecía. el propio-viejo-bob tuvo oportunidad de saborear el aire caliente cordobés.
a mi lado, inmerso en la solitaria muchedumbre,
está un hombre que jura que no es culpable
de I shall be released
antes de I shall be released, canción nunca editada en disco y sólo escuchada en conciertos, bob había interpretado genialmente Tweedle dee & tweedle dum, de su último disco:
Tweedle Dum te acuchillará allá donde estés
"Ya estoy harto de tu compañía,"
Dijo Tweedle Dum a Tweedle Dee
dylan seguía obsesionado con el no-sonido de su piano y los escorzos de su cascada voz. sólo cuando cogía la armónica recordaba al dylan de sus discos clásicos, porque ni rememorando canciones antiguas nos podía trasladar a la época del Highway 61 o Blonde on blonde. aunque eso cambió un poco cuando comenzó con Stuck inside of mobile with the memphis blues again:
el abuelo murió la semana pasada
y ahora está enterrado en las rocas
pero todos hablan todavía
de la gran impresión que se llevaron.
pero yo me esperaba que pasase,
sabía que perdería el control
cuando encendió una hoguera en la calle principal
y la acribilló a balazos.
Oh, mamá, puede ser esto el fin
antes, la interpretación magistral de Lay, lady, lay había terminado con una micro-tanda de canciones poco conocidas por mí. dylan seguía a lo suyo: tocandose el sombrero, entrando y saliendo de la oscuridad a cada final de canción (qué haría allí?), sin una mirada a público, sin una palabra. lo bueno estaba por llegar.
el fin de fiesta comienza con Forever young, absolutamente emocionante; sigue muy rockeramente con Summer days y a la caseta. en los bises bob se hizo de rogar, pero volvió con tres temas y no dos (como acostumbra).
Eh, señor panderetero, toca una canción para mí,
no tengo sueño y no hay sitio a donde pueda ir
el Mr. Tambourine man sonó irreconociblé, sólo supe qué cantaba en el estribillo (y eso que es de mis preferidas). la enlazó sin pausa con Like a rolling stone, y entonces se dirigió al centro; dijo thanks you y un intento más que baldío de español (muchas gracias); presentó a los miembros de la banda como si estuviera a punto de irse a dormir y terminó el espectaculo con una versión a lo hendrix de All along the watchtower.
después una camisetilla conmemorativa, una cerveza tardía y se acabó. fin del día dylan.
4 comentarios
nando -
Gru -
En fin, Parapo, que me alegro de que lo disfrutases, porque llevabas un tiempo deseando de que llegara el momento de ver a la Leyenda.
petalo -
angel theangel -
con sus manías, con su poca simpatía o simplemte dandole al público música y nada de falsas palabras "os quiero" y demás...
y lo importante fue la música...y sus canciones irreconocibles pero reconocidas...
gran momento para la historia