Blogia
apuntes del natural

odiarse

odiarse resulta curioso que apenas haya nombrado en este blog a emile cioran, uno de mis mitos personales. para solventar esta ausencia os muestro una parte del capítulo Odiarse, de La tentación de existir (hace poco me dijeron: "cómo te gusta echarte mierda encima", actitud cioranesca donde las haya ;)).

Odiarse

el amor propio es cosa fácil: como brota del instinto de conservación, incluso los animales lo conocerían si estuviesen un poquitín pervertidos. lo que ya es más difícil, y en lo cual sólo sobresale el hombre, es en odiarse a sí mismo. tras haber causado su expulsión del paraíso, hizo lo que pudo para aumentar la separación que le distancia del mundo, para mantenerse despierto entre los instantes, en el vacío que se intercala entre ellos. la conciencia emerge de él y en él hay que buscar el punto de partida del fenómeno humano. me odio: soy un hombre; me odio absolutamente: soy absolutamente hombre. ser consciente es estar dividido uno mismo y odiarse. este odio zapa nuestras mismas raíces, al mismo tiempo que proporciona savia al árbol de la ciencia.

5 comentarios

Pol -

Algunas veces me he odiado.Pero más he odiado las circunstancias q han hecho q me odie,porque yo no merezco ser odiado.

Xabi -

No te preocupes parapo, yo tamb te odio....no hace falta ke te odies tanto a ti mismo, dejate odiar un pokito mas ;)
Xabi

chencho -

No está mal eso de un poco de diente por diente con uno mismo (a veces)

parapo -

sería esa la solución a mi vida? ambos sabemos que no :P